Su principal objetivo es ayudar a los profesionales de la salud a llegar a un diagnóstico temprano y a que el paciente reciba e inicie el tratamiento lo antes posible. Lo hace gracias a la capacitación e información actualizada en enfermedades poco frecuentes. Su tarea cotidiana consiste en recorrer servicios de hospitales que están relacionados con la patología con la que trabaja. En este caso se trata de cuatro enfermedades lisosomales que suelen estar sub-diagnosticadas o mal diagnosticadas.
Mariela se ocupa de capacitar médicos para que tengan en cuenta elementos que pueden hacerlos sospechar de una determinada patología. Además, si aparece un paciente con los síntomas correspondientes, trata de acompañarlos en el proceso de inicio de la terapia.
Actualmente es asesora en un laboratorio internacional que está en la vanguardia de la generación de medicamentos. Estudia constantemente todos los papers científicos sobre casos de pacientes que han sido diagnosticados con enfermedades poco frecuentes. Y parte de su actualización profesional la lleva a participar en Congresos Nacionales e Internacionales sobre el tema.
“Lo que más me realiza de mi trabajo es poder ayudar a el paciente a que tenga un diagnóstico y a que pueda acceder rápidamente al tratamiento, esto sería el resultado final, el objetivo para el cual mediante el asesoramiento que se le brinda a el médico y las herramientas diagnósticas que se le facilita pueda llevarlo a cabo”, explica Mariela.
Para llegar donde está, Mariela invirtió en su formación: es licenciada en Ciencias Médicas del B. Medical Laboratory Science que pertenece Hadasah Academic College, de Jerusalem, una gran referencia académica. Allí obtuvo su título de grado en Ciencias de la Vida, carrera que aún no existe en universidades argentinas, a pesar de una creciente demanda de su especialidad en la industria mundial de medicamentos.
Mariela dedica hoy su energía y pasión en armar un circuito en cada hospital que permita la identificación de pacientes con enfermedades poco frecuentes y uno de sus objetivos es formar médicos que sean referentes en esas patologías.
Su capacidad para cumplir multitareas es motivo de orgullo: “Se precisa de una organización y planificación que particularmente creo que es un aspecto que las mujeres tenemos más potenciado”.