Es oficial principal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, trabaja en el Departamento de Logística Aeroportuaria del Centro de Análisis, Comando y Control, y es la primera y única mujer que repara máquinas de Rayos X.
Lucia hace 8 años que forma parte de la Policía de Seguridad Aeroportuaria. Antes de ingresar a esa fuerza, se recibió de radióloga, pero no llegó a ejercer la especialidad.
Dispuesta a hacer la carrera en la fuerza, se inició haciendo tareas de control en la guardia preventiva del aeropuerto Ministro Pistarini de Ezeiza. Allí controlaba el ingreso de pasajeros. Luego fue auxiliar en Recursos Humanos de la unidad hasta que logró el pase a Logística.
“En el aeropuerto aprendí todo sobre radiación: Me capacitaron en todas las máquinas de rayos X o scanners - las Smith y las Nutech – aprendí a usarlas y a repararlas”, dice Lucía, que es la única mujer que arregla esas máquinas. Cuenta también que le resulta fácil trabajar con hombres y que le gustan las herramientas y la tecnología.
Lucia destaca que el Departamento de Logística tiene responsabilidades a nivel nacional, específicamente su área es el Departamento de Sistemas de Inspección y Detección que se encarga de los equipamientos para el control de los aeropuertos. Sus tareas son trasladar los equipos de máquinas de Rayos X a los aeropuertos de todo el país, instalarlos, ponerlos en funcionamiento y hacer las reparaciones cuando es necesario.
Además brinda capacitaciones de nivel técnico a cadetes y oficiales del departamento. También, confecciona relevamientos solicitados por el Ministerio de Seguridad de la Nación e informes sobre el mantenimiento de los scanners.
Con las capacitaciones del personal logístico en los aeropuertos, Lucia recorrió casi todo el país: sólo le falta conocer los aeropuertos de El Calafate, en Santa Cruz, Tucumán y Formosa.
Señala como uno hito en su experiencia laboral, los operativos de control que montaron en todos los puntos del país durante la Cumbre del G20, que tuvo lugar en Buenos Aires en 2018. Entre sus desafíos está poder “seguir aprendiendo porque siempre entra equipamiento nuevo que hay que estudiar y aprender a manejar”.