María Laura Cordero

Durante mi formación de grado como Licenciada en Nutrición tuvieron un impacto muy especial en mí las prácticas en salud pública de la sabia y generosa mano de la Doctora Marta Viñas, referente local y nacional. Las diferentes participaciones en el campo de la salud comunitaria, junto con mis primeros pasos en investigación en el área de la salud adolescente, me motivaron a continuar formándome y así es que, una vez recibida, me especialicé en Salud Social y Comunitaria.

En el transcurso de mis años de ejercicio profesional en el primer nivel de atención de la salud, pude conocer en profundidad algunas problemáticas relacionadas a la alimentación. Motivada por ampliar estos saberes para poder aportar más desde mi lugar y especialmente teniendo en cuenta a aquellas poblaciones especialmente vulnerables como los niños es que, en el 2013, me postulé y fui afortunadamente seleccionada por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) para llevar a cabo un plan de trabajo referido a la calidad de vida y el estado nutricional de los niños de Tucumán.

Actualmente concluí mi formación doctoral en Ciencias Sociales y en este camino he logrado articular interdisciplinariamente mis saberes con otras investigadoras reconocidas en el país, como la Dra. Florencia Cesani y la Dra. Patricia D Arterio, a quienes admiro profundamente y me han acompañado en este camino.

En el campo de las ciencias, y particularmente las sociales como es en este caso, las tareas cotidianas son diversas, desde el trabajo en escuelas con niños y niñas administrando encuestas y relevando mediciones corporales como peso, talla, circunferencias y pliegues para conocer el estado nutricional y la composición corporal, hasta la redacción y publicación de artículos en revistas científicas reconocidas a nivel nacional e internacional.

También es cada vez más importante el desarrollo de actividades de divulgación de la ciencia por medios tales como la radio, la televisión y los periódicos. La transferencia y regreso del conocimiento científico a la sociedad y sus instituciones cobra cada vez más importancia. En mi caso, se concreta a partir de la generación de productos tecnológicos susceptibles de ser implementados desde las políticas públicas: los mapas de estado nutricional de las áreas que estudio en mi provincia pretenden aportar al conocimiento y abordaje de los problemas de salud de los niños y niñas tucumanos.

Hoy día, la obesidad es un problema mundial, y afecta especialmente a las poblaciones infantiles. Desde nuestro lugar, nos encontramos desarrollando mapas de obesidad para poder transferir esta información a los diferentes ministerios, y de esta manera trabajar de manera conjunta en el diseño de propuestas que mejoren la calidad de vida de la infancia tucumana.

Me encantaría poder continuar esta apasionante carrera científica. Quizás uno dice ciencia e imagina una persona con bata en un laboratorio... Sin embargo, esta vertiente de la ciencia quizás "poco tradicional" resulta valiosa porque colabora en la visibilización y abordaje de problemas sociales concretos.